Dentro de este bello deporte existen infinidad de modos de preparar jugadas o de estilos de jugar, así como sus componentes más básicos o simples.
·
El pase: Es
la acción de entregar el balón a otro jugador, de la forma más precisa. Los
pases pueden ser cortos, medios o largos, en función de la distancia. Según su
trayectoria, serán ascendentes, descendentes, parabólicos, o al ras de suelo y
según su dirección: en profundidad, lateral, retrasados y en diagonal.
·
Conducción: Es
un gesto básico de la técnica, ya que es la base para dominar el pase, la
conducción y el tiro. Es necesario controlar todos los factores como el
contacto con el balón, la presión ejercida, el equilibrio de todo el cuerpo…
para alcanzar la máxima eficacia posible.
·
El
Regate: Se utiliza para librarse de los adversarios sin perder el dominio del
balón. El regate se puede realizar con finta o sin finta, con movimientos
bruscos e inesperados para desequilibrar al defensor y sortearlo fácilmente, o
bien sin finta.
·
Tiro a portería: Esa la acción de golpear
el balón con cualquiera de las superficies de contacto permitida, en dirección a
la portería y con la finalidad de marcar gol. Se puede marcar tirando a máxima
potencia, de golpes suaves y/o con vaselina, se puede chutar con el interior
para así lograr más colocación, también de cabeza, de tacón…
Existen distintos tipos de tácticas básicas, que son las
que se usan siempre:
·
Tácticas defensivas:
Se hace todo lo posible por defender fuera del área del portero para evitar que
los atacantes del equipo contrario anoten goles a su favor.
·
Tácticas
ofensivas: Dentro de las tácticas ofensivas se ofrece un amplio abanico de
posibilidades, más que en las defensivas, pues las ofensivas habitúan a ser más
desenfrenadas, raudas e inesperadas. Éstas consisten en idear jugadas lo más
vertiginosas posibles para sorprender al atacante y desbordarlo con facilidad
para marcar gol.
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